La Batalla de
Damasco ha comenzado
Por Thierry Meyssan
Las potencias occidentales y los países del Golfo han emprendido la
operación de guerra secreta más importante que se haya visto desde la de los
Contras, en Nicaragua. El objetivo de la batalla de Damasco no es el
derrocamiento del presidente Bachar al-Assad sino quebrar el Ejército Árabe
Sirio para garantizar la dominación de Israel y Estados Unidos en el Medio
Oriente. Mientras la ciudad se prepara para un nuevo asalto de los mercenarios
extranjeros, Thierry Meyssan pasa en revista la situación.
RED VOLTAIRE | DAMASCO (SIRIA) | 19 DE JULIO DE 2012
Provenientes del extranjero, los Contras tomaron
varios puestos fronterizos al comienzo de su invasión contra Siria.
Hace ya 5 días que Washington y París dieron inicio a la operación «Volcán
de Damasco y terremoto de Siria». No se trata esta vez de una campaña de
bombardeos aéreos sino de una operación de guerra secreta
comparable a desarrollada en Centroamérica en tiempos de la
administración Reagan.
Entre 40 y 60,000 Contras,
principalmente libios, han entrado en el país en varios días, esencialmente a
través de la frontera jordana. La mayoría están vinculados con el Ejército
«Sirio» Libre, estructurado bajo las
órdenes de Turquía para servir de pantalla a las operaciones secretas
de la OTAN. Algunos son miembros de grupos de fanáticos, entre ellos al-Qaeda,
creados bajos las órdenes de Qatar y de una facción
de la familia real de Arabia Saudita: los Sudairis. Se apoderaron a su paso de
varios puestos fronterizos, antes de llegar a la capital, donde sembraron la
confusión atacando al azar los objetivos que encontraban a su paso: como grupos
aislados de policías o de militares.
Los generales Hassan Turkmani, Daud Rajha y Assef
Chawkat, muertos en un atentado el 18 de julio de 2012.
En la mañana del miércoles, una explosión destruyó la sede de la Seguridad
Nacional, donde se reunían varios miembros del Consejo de Seguridad Nacional.
La explosión costó la vida al general Daud Rajha, ministro de Defensa; al
general Assef Chawkat, ministro adjunto; y al general Hassan Turkmani, adjunto
del vicepresidente de la República. Se desconoce aún el modo exacto en que fue
realizada la operación. Podría tratarse de un atentado suicida o de un ataque
realizado con un avión sin piloto.
Washington esperaba que la decapitación parcial del aparato militar sirio
condujese a varios oficiales superiores a desertar con sus tropas, o sea a
volverse contra el gobierno civil. Pero no ha sido así. El presidente Bachar
al-Assad firmó inmediatamente las nominaciones de los sucesores de los
fallecidos, garantizando así a la perfección la continuidad del Estado.
En París, Berlín y Washington, los mismos que ordenaron la operación se han
entregado además a una sucia maniobra que consiste en condenar el acto
terrorista a la vez que confirman su apoyo político y logístico militar a los
terroristas que lo cometieron. De forma totalmente desvergonzada concluyeron
que los responsables de los asesinatos no son los realizadores del atentado
sino las propias víctimas, por haberse negado a dimitir bajo la presión de esos
mismos gobiernos y por no haber aceptado entregar su patria a los apetitos
occidentales.
Caracas y Teherán han expresado sus condolencias a Siria, subrayando que el
ataque fue ordenado y financiado por las potencias occidentales y los países
del Golfo. Moscú también expresó sus condolencias y observó que el pedido de sanciones
contra Siria en el Consejo de Seguridad de la ONU constituye un respaldo
político a los terroristas que atacan ese país.
El ministro de Información, Omran al-Zou’bi, se
expresa ante las cámaras de la televisión siria después del atentado que decapitó
parcialmente el Ejército Árabe Sirio.
Los canales de la televisión siria comenzaron a transmitir cantos
patrióticos e imágenes del ejército. Interrumpiendo la programación, el
ministro de Información, Omran al-Zou’bi, lanzó un llamado a la movilización de
toda la ciudadanía. No es momento para querellas entre gobierno y oposición. La
Nación está enfrentando una agresión externa. Recordando el artículo que
publiqué enKomsomolskaya Pravda, donde describía la operación
mediática de desmoralización preparada por los canales occidentales y del
Golfo [1], el
ministro alertó a sus conciudadanos sobre el inminente comienzo de dicha
operación. Posteriormente desmintió las falacias de los canales del Golfo sobre
un supuesto motín en la 4ª división y sobre una serie de explosiones que
habrían destruido el cuartel principal de dicha división.
Los canales nacionales sirios han transmitido varias veces por hora las
indicaciones necesarias para que los telespectadores sirios puedan captar sus
programas a través del satélite Atlantic Bird, en caso de que se
interrumpiera su transmisión a través de los satélites ArabSat y NileSat.
En Líbano, Hassan Nasrallah recordó la hermandad de armas existente entre
el Hezbollah y Siria, forjada en la lucha contra el expansionismo sionista, y
garantizó su respaldo al Ejército Árabe Sirio.
El atentado fue la señal de inicio para la segunda parte de la operación.
Los grupos armados infiltrados en la capital se lanzaron al ataque de diversos
objetivos, de forma más o menos selectiva. Por ejemplo, un centenar deContras atacaron la casa próxima a mi apartamento
al grito de ¡Alá Akbar! Un alto
responsable militar reside en el lugar. Hubo 10 horas de combate
ininterrumpido.
Al caer la noche, el ejército respondía con discreción a los ataques de los Contras. Posteriormente, se dio la orden de responder a
los atacantes lo más enérgicamente posible. No se trataba ya de luchar contra
terroristas que venían a desestabilizar Siria. La nueva misión era enfrentar
una inconfesable invasión extranjera y proteger la patria en peligro.
La aviación entró entonces en acción para destruir las columnas de
mercenarios que tratan de alcanzar la capital.
Al final de la mañana, la calma se restablecía progresivamente en la
ciudad. Los Contras y sus colaboradores se
veían obligados a retirarse. Se restablecía la circulación en las carreteras y
las grandes arterias y se instalaban barreras para filtrar el tránsito en el
centro de la ciudad. La vida volvía a su curso cotidiano, aunque aún podían
escucharse disparos aislados en diversos lugares. La mayoría de los comercios
permanecían cerrados y largas colas podían verse ante las panaderías.
Se piensa que el asalto final puede tener lugar durante la noche del jueves
al viernes y durante la jornada del propio viernes. Es indudable que el
ejército nacional sirio saldrá nuevamente victorioso ya que tiene a su favor la
correlación de fuerzas. Se trata además de un ejército de reclutas que goza del
apoyo de la población, e inclusive el respaldo de la oposición política
interna.
Conforme a lo previsto, los satélites ArabSat y NileSat desconectaron
durante la tarde la señal del canal sirio de televisión Ad-Dounia. La CIA pirateó la cuenta de Ad-Douni
en Twitter para transmitir mensajes falsos que anunciaban una retirada del
ejército nacional sirio.
Los canales de televisión del Golfo anunciaron un derrumbe de la moneda
siria, como preludio de la supuesta caída del Estado. El gobernador del Banco
Central, Adib Mayaleh, se presentó ante las cámaras de la televisión siria para
desmentir la nueva intoxicación y confirmar que la tasa de cambio sigue siendo
de 68,30 libras sirias por un dólar estadounidense.
Conferencia de prensa del general Robert
Mood sobre la batalla de Damasco, que él mismo observa desde… las ventanas de
su hotel.
Se desplegaron refuerzos en los alrededores de la plaza de los Omeyas, para
proteger los estudios de la televisión estatal, que todos los enemigos de la
libertad consideran un objetivo prioritario. Se han instalado estudios
auxiliares en el hotel Rosa de Damasco, donde pasan cómodamente su tiempo los
observadores de la ONU. La presencia de estos observadores militares de la ONU,
que no han permitido que el ataque contra la capital interrumpa sufriente, sirve de facto de
protección a los periodistas sirios que arriesgan sus vidas para mantener
informados a sus conciudadanos.
En el Consejo de Seguridad de la ONU, la Federación Rusa y China
recurrieron por tercera vez al veto ante una proposición de resolución en la
que los países occidentales y las monarquías del Golfo trataban de abrir el
camino a una intervención militar internacional. Los representantes de Rusia y
China ante el Consejo de Seguridad han denunciado incansablemente la propaganda
tendiente a presentar como una revuelta ahogada en sangre lo que en realidad es
una agresión exterior contra el Estado sirio.
Se estima que la batalla de Damasco puede reanudarse esta noche.
[1]
«НАТО готовит переворот в Сирии», por Thierry Meyssan,Komsomolskaya Pravda. Artículo en francés: «L’OTAN prépare une vaste opération
d’intoxication», Réseau Voltaire, 10 de junio de 2012.