No son
buenas las noticias de hoy, mucho menos cuando el primer ministro israelí,
Benjamín Netanyahu pidió a EEUU que ataque a Irán, según informó el diario
israelí Maariv. Posteriormente, y de manera unilateral, aviones militares
israelíes entraron en el espacio aéreo de Siria y bombardearon el centro de
investigación de la PAC en Damasco. También, un convoy de transporte que
presuntamente portaba armas de Siria al Líbano fué atacado en la columna de la
frontera sirio-libanesa. Según el canal de televisión británico Sky News, en
las últimas 48 horas, aeronaves de la Fuerza Aérea israelí violaron el espacio
aéreo libanés 12 veces.
Aunque parezca sorpresivo, todo ésto se estaba gestando desde el año pasado, y había sido postergado por el efecto *21-12-2012*, conjuntamente con los comicios en EEUU. Iniciado el 2013, año de grandes sorpresas como decía hoy, Corea del Norte no ha cesado con sus lanzamientos de misiles de prueba ni con sus satélites fallidos. Tampoco es casual que Vladimir Putin estuviera advirtiendo que si Siria o Irán eran atacados, EEUU e Israel deberían explicarle al mundo porqué desataron la *última guerra mundial*...
No es tampoco casual que China estuviera realizando sendos movimientos de tropas, y amenazara a Japón si una guerra se desatara en Oriente Medio.
Han estado jugando con pólvora en medio de una fogata...todos lo sabemos Señores amos del mundo..y sabemos que nada les importa más que sus siniestros planes. El Universo, el sistema solar, el clima, todo todo..les estaba enviando las señales de que se podía frenar el desbande de los elementos, pero han hecho oídos sordos a la Creación. Y si estaban alarmados por lo que sucede, ahora no existirá palabra humana para reflejar el terror que deberán padecer quienes ponen en vilo el equilibrio que no debe ser quebrantado. Ese Sol que parece dormido y que desconcierta a todos, ese Sol que provoca la burla de quienes creen que se ha apagado, ese Sol que respira hondo y cuenta hasta diez para no intervenir..va a soplar tan fuerte que los EMP quedarán empequeñecidos como si fueran un estornudo y será el inicio del fin de ésta civilización.
Estas cosas las habíamos tratado hace más de un año, y estas cosas que ahora suceden estaban programadas. El final de los libros son premeditados por su autor, y si no ejecuta el final tal como lo ha pregeniado, el libro no se vende. Lo grande de todo esto es que se agotaron los tiempos y las argucias de un libro que amoldó el final a algo que un día debía cumplir, y el tiempo parece estar llegando, y hay que demostrar su veracidad, pero... el final en verdad va a ser otro.
Yo ruego y espero que esto que ha comenzado hoy, se detenga. Y que sea una bravuconada más, porque si realmente se ha puesto en marcha la impresión de las hojas finales del libro, ya habrá muy poco que decir y qué hacer. Una imagen vale más que mil palabras, el Sol hoy, y su pequeña advertencia, no la mía;
Gilgamesh***
