Salvador Freixedo,
Extraterrestres y creencias religiosas • Casiopea
Consideraciones de un
ex-sacerdote jesuita
"Cuando dedujimos que otros
seres mucho más avanzados que nosotros, pero, al igual que nosotros, distantes
infinitamente de Dios, tenían que darle solución a los muchos enigmas que la
vida y el cosmos les planteaban, sospechamos que sus soluciones no eran tan
absolutas como las nuestras y poco a poco tuvimos la certeza de que ni siquiera
eran las mismas, aun para cosas fundamentales."
Extraterrestres y creencias
religiosas
Conocimientos recibidos de seres
de Casiopea
Adoradores del Universo Físico.
Esas criaturas ubicuas popularmente conocidos como los "Grises", son
sondas de la 4ta. Densidad creadas por los Reptilianos (los seres que a su vez
dieron origen a todos los cultos a la Serpiente extendidos por el orbe entero)
por medio de tecnología cibergenética. Sus funciones alimenticias guardan
similitud con las de estos últimos. Existen en virtud de su interacción con las
almas de los Reptilianos, una especie de relación de interface conseguida por
medios tecnológicos más avanzada que cualquiera de que tenga conocimiento el
ser humano.
Los "Grises" no solamente son diseñados y creados en
forma artificial, sino que también funcionan como una proyección mental y
física de los Reptilianos. Presentan muchas de las mismas capacidades de estos
últimos pero se diferencian en su apariencia física y por el hecho de que no
tienen un alma propia (la morfología y estructura biológica de sus órganos internos
es también diferente). No obstante esto, su funcionamiento es similar, y para
poder manifestarse en forma física como proyecciones sólidas en la 3ra densidad
(cosa que en algunos casos solamente pueden conseguir por períodos limitados de
tiempo y con gran inversión de energía), deben absorber los nutrimentos
adecuados en la manera descrita anteriormente.
Los Reptilianos tienen la
apariencia de lagartos erectos sobre dos patas, de entre 6 y 8 pies de altura y
con rasgos humanoides. Idolatran el universo físico. Todos los seres que sirven
a su propio ego son consumidos por el deseo de manifestarse por medio de
cuerpos físicos.
El Salto Cuántico
Los Reptilianos han decidido
plantarse firmemente en la modalidad existencial de SAS y por ello deben constantemente
absorber grandes cantidades de energía negativa proveniente del 3er. y 2do.
Niveles. Puesto que han optado por permanecer en este nivel para atrincherarse
con absoluta determinación en él y puesto que han renunciado a seguir el flujo
natural de progreso hacia los niveles superiores, su raza ha sufrido un
estancamiento patológico como resultado del cual está en una etapa de diezmado,
y esa es la razón por la que en esta coordenada espacio-temporal particular del
ciclo, tratan desesperadamente de tomar tanta energía como les sea posible;
esto explica también su iniciativa de poner en marcha un proceso de
reconstrucción metabólica a nivel racial. Han estado viajando constantemente en
el "tiempo", tanto hacia adelante como hacia atrás, para manipular los
eventos de la historia de forma tal que las condiciones les sean propicias para
la absorción de una máxima cantidad de energía negativa, y en el momento en que
se efectúe la transición del 3er. al 4to. nivel, puedan lograr varios
objetivos:
Preservar su
raza como una especie viable;
Prosperar en
número;
Incrementar su
poder;
Expandir su
raza a lo largo de la realidad de la 4ta. Densidad.
En un estado de perfecta
inmovilidad espacial han estado viajando hacia adelante y atrás en el tiempo
para allanar el camino hacia la consecución de estos objetivos.
Sus esfuerzos, no obstante,
pueden parecer desesperados y fútiles, puesto que pierden de vista el hecho de
que, si bien en la 3ra. Densidad han tirado de los hilos con relativa
impunidad, la 4ta.
Densidad es un campo de juego
mucho más nivelado, que no otorga ventajas a ninguno de sus habitantes. Allí se
corren los velos que nublan la percepción de los seres humanos y se sueltan los
grilletes que aprisionan sus pies.
Su talón de Aquiles Reptilianos,
entonces, reside en el hecho de que solamente ven las cosas que desean ver:
experimentan la más alta manifestación posible de lo que se conoce como
"anhelación compulsiva". En la 4ta. Densidad el objeto de la
anhelación compulsiva se convierte en la realidad que allí se experimenta, de
forma tal que la realidad percibida está construida de los propios deseos y
anhelos y estos conforman nuestro estado de conciencia.
Publicado en Casiopea